• Paso 1

Determinar el tipo de usuario y dar las razones de su elección. Describirlo lo más preciso posible, de forma que sea fácil reconocerlo; se puede usar la técnica Diseño de Personas.

• Paso 2

Mapear las etapas de la experiencia de aprendizaje por las que el usuario pasa, en un eje horizontal, a modo de línea de tiempo. Normalmente, se mapeará por sesión, tomando en cuenta cómo las emociones de los estudiantes cambian en el transcurso del periodo lectivo. Tomar el punto de vista del usuario, mapeando las actividades en cada punto de contacto (Touchpoint) con objetos, personas o servicios.

• Paso 3

Argumentar preguntas en el eje vertical:

¿Cuáles son los objetivos de la persona  participante o interesado?

¿Qué hace  el participante o interesado?

Desde el punto de vista del participante o interesado, ¿qué funciona bien? ¿Qué no?

¿Qué emociones están relacionadas?

• Paso 4

Añadir alguna pregunta que pueda ser útil para el proyecto en específico; por ejemplo, ¿cuáles puntos de contacto encontró el participante o interesado? ¿Qué otras personas hacen trato con los participantes o interesados? ¿Qué dispositivos está usando  el participante o interesado? ¿Qué gana o qué logra  el participante o interesado?

• Paso 5

Responder todas las preguntas para cada etapa, preferiblemente con un enfoque multidisciplinario.

• Paso 6

Registrar la información en una tabla.

La intencionalidad de todo esto es entender cómo las emociones pueden impulsar la motivación intrínseca del estudiante, de manera que ponga su atención dentro del proceso de aprendizaje; si es necesario, en los últimos pasos, dependiendo de la experiencia que se esté diseñando.